Título: En serio me gustas...
Tipo: TwoShot
Pareja: Takanoo –Takaki X Inoo-
Advertencia: NO
Resumen:
Pareja: Takanoo –Takaki X Inoo-
Advertencia: NO
Resumen:
Últimamente lo mira de otra manera, aquel chico de mirada
relajada que conocía desde que eran pequeños, ahora se veía diferente ante sus
ojos. Y por más que lo miraba no lograba entender que era lo que ahora en él
era distinto.
Últimamente lo mira de otra manera, aquel chico de mirada
relajada que conocía desde que eran pequeños, ahora se veía diferente ante sus
ojos. Y por más que lo miraba no lograba entender que era lo que ahora en él
era distinto.
-Oigan…- habló tratando de sonar lo más casualmente
posible y cuidando que su nivel de voz
solo pudiera ser escuchado por las tres personas que se encontraban sentados en
la mesa junto a él, voltearon a mirarlo curiosos, ya que desde hacia un rato
cada quien estaba sumergido en lo suyo, sin charlar con nadie, ellos en la mesa
y el resto del grupo paseándose por el camerino. –Ustedes… ¿no han notado algo
extraño en él?- señalo haciendo un ademan con la cabeza hacia donde estaban
Inoo y Keito mirando una revista.
-¿En Keito?- Pregunto Yamada destapando una botella de
agua- Keito sigue siendo Keito, el siempre a sido algo extraño de todas formas.
-Sí, sí. Él siempre tiene esa extraña aura a su
alrededor- ratifico Yabu echándole un vistazo a Okamoto.
-No, no. Hablo de Inoo-chan- dijo riendo un poco
nervioso.
-¿Inoo-chan?-ladeo su cabeza- Lo veo igual que siempre.
–contesto Daiki viendo hacia donde los otros dos.
-Arioka-san, Yamada-san. Por favor. –les llamo un miembro
de staff desde la puerta. Tenían una sesión fotográfica, y debían pasar en
parejas como era costumbre. Ambos salieron dejando en la mesa solo a Yabu y
Takaki.
-Y entonces… dices
que ves raro, a Inoo-chan… ¿Qué parte de él?- le pregunto el mayor. La verdad
que tanto tiempo juntos le había enseñado a descifrar algunas cosas. Y sabía
que Takaki preguntaba seriamente sobre su compañero.
Yuya se apeno un poco, bajo la cabeza unos instantes y
miro de nuevo hacia donde se encontraba el susodicho.
-No lo sé… lo noto raro. Ah, pero no en el mal sentido…
algo en él me parece distinto, pero no sé que es. Se ve bastante… ¿lindo?-
contesto ladeando la cabeza.
Yabu lo miro un momento, luego miro a Inoo, volvió su
mirada a Takaki y sonrió.
-Inoo-chan siempre ha sido lindo, creo que de todos
definitivamente él es el más lindo.-
-Si ¿verdad?- sonrió Yuya agachando su cabeza.
Yabu asintió poniendo su codo sobre la mesa y su mejilla
sobre su puño… esto era algo inesperado…
-¡Takaki mira!- grito Inoo corriendo hacia el susodicho,
rodeando su brazo izquierdo sobre los hombros del otro quedando en una pose que
parecía un abrazo.
Yuya solo podía ver lo que parecía una sesión de alguna
revista que habían hecho hace meses.
-Takaki contesta sinceramente ¿Verdad que yo me veo mucho
más guapo que Keito?- Sonrió Inoo acercando su mejilla a la cabeza del otro, su
pecho y tórax totalmente recargados en su espalda.
-Ah… bueno- rio nervioso por la cercanía de sus cuerpos-
creo que los dos se ven muy bien.-
-¿De qué hablas? ¡Debes escoger uno, uno!- puchereo
ligeramente Kei.
-Preguntémosle a Yabu mejor. - Sugirió Keito.
-Valla, valla…. Esto es interesante… déjame ver- sonrió
tomando la revista de las manos de Inoo.- Ah, son unas lindas fotos… mmm…
Keito, se ve bastante masculino y guapo. Inoo-chan se ve encantador y sexy. ¿No
crees?- dijo mirando a Yuya directamente a los ojos. Este se quedo en shock por
un momento.
¿Inoo? ¿Sexy?
-Eh~ con que es así… ¿Qué piensas Takaki? ¿Me veo
sexy?- le sonrió guiñándole un ojo en
forma de coqueteo.
-Yuyan, es tu turno con Chinen.- Dijo Daiki volviendo de
hacer su parte de la sesión, abanicándose con una toallita.
Yuya se levanto rápidamente saliendo del camerino sin
mirar atrás y sin contestar nada más, dejando a un tambaleante Inoo al cual
empujó sin querer.
Kei se quedó mirando seriamente hacia la salida,
apretando ligeramente la revista en sus manos. Acto que no paso desapercibido
por Yabu, que miraba toda la escena con un toque de sádica diversión… hacia
tiempo que no veía algo como esto…
Takaki se la pasó toda la sesión un poco en las nubes,
cosa que realmente nadie notó, ya que el chico solía ser bastante distraído en
realidad, nadie excepto…
-¡YUYA!-Le asusto Chinen dándole un empujoncito por la
espalda, asiendo saltar de miedo al mayor.
-Wooah~ no hagas eso- rio torpemente. Pero su sonrisa se
veía un tanto apagada. Cosa que el menor notó en seguida.
-¿Estas triste por algo?- pregunto directamente.
-Ah… no… no estoy triste-
-Ya veo… entonces ¿Por qué te ves tan distante?- le
interrogó de nuevo sentándose sobre unas cajas que estaban por algún lugar del
estudio.
-Nada en especial…- contestó sentándose a lado del
pequeño.-Creo que simplemente estoy confundido…-
-Yuya es ese tipo de persona que vive confundida- rio
Chinen.
Takaki rio también, posando su vista al frente hacia
donde Inoo y Yabu empezaban su parte de la sesión.
-nee Chinen… ¿no notas algo diferente en Inoo?- le
pregunto sin despegar su mirada de donde se posaba.
Chinen miro también la escena de Inoo y Yabu posando y
sin pensárselo mucho grito -¡INOO-CHAN!- haciendo que tanto él como Yabu
voltearan a mirarlos, Inoo los saludo sonriente agitando su mano, mientras Yabu
acomodaba un poco su ropa.
Kota miro de nuevo a los chicos sentados en las cajas y
con su natural sonrisa tomó a Inoo de la cintura pegando su cuerpo al suyo
dando una pose que al camarógrafo le encanto y sin dudarlo comenzó a lanzar de
nuevo sus flashes.
Chinen rio por el acto de Yabu e iba a comentarle algo al
respecto a Takaki, pero este ya se había levantado y dirigido al camerino
nuevamente.
Entró con una cara de pocos amigos y se sentó de nuevo en
su lugar en la mesa, haciendo un poco de ruido por la rudeza con la que lo
hizo. Yamada lo volteó a mirar un poco sorprendido, alejando cautelosamente su
silla de él, en ese momento, Yuya tenía una cara que daba miedo.
-waa Yuya está enojado- chillo Daiki de forma infantil.
-Cállate- le contesto secamente Takaki.
-Oh, en serio estás enojado- dijo con su voz normal,
acercándose a él.
Yamada los miraba guardando su distancia, Takaki
desprendía un aura asesina y él no quería morir tan joven. Keito ignoraba
totalmente la situación, mientras se arreglaba el cabello. Yuto leía la revista
que momentos antes traía Kei.
-¿Qué te pasa? ¿Por qué la molestia?-le interrogo Daiki.
-¿Acaso hoy es el día de pregúntale a Yuya?- Rio chinen
entrando al camerino también.-Creo que hoy nuestro Yuya esta con emociones de
montaña rusa. Arriba y abajo.- le dijo chinen a Daiki mientras comía unas
papitas que ignoraba totalmente que no fueran suyas.
-Ya veo, Takaki esta sensible- sonrió picándole las
costillas a Yuya, haciéndolo reír por las cosquillas- sensible, sensible,
sensible Yuyan~ -canturreo picando más al chico, el cual intentaba alejarse del
ataque del bajito pero le era imposible, se inmovilizaba cuando le hacían eso.
En ese momento Inoo y Yabu volvían de su turno. Topándose
con la comprometedora escena de un Daiki casi encima de Takaki manoseándolo por
todo el cuerpo.
Kei miro por unos segundos a Daiki y girándose con un
semblante serio, anuncio que iría al baño.
Takaki tenía lágrimas en los ojos por su usual ataque de
risa, lo que hizo que su maquillaje se corriera. Yabu al notar esto
inmediatamente lo envió al baño también, diciendo que se veía como un panda con
el maquillaje corrido de esa manera, Yuya obedeció sin chistar, no quería verse
como un panda.
Hikaru, quien se había mantenido al margen de toda la
situación desde el inicio al fin, le envió una mirada a Yabu, quien casi como
telepatía se la devolvió, y sin palabras ambos salieron del camerino.
-¿Qué es lo que sabes?- pregunto Hikaru no más saliendo
del lugar.
-Creo que Yuya está confundido por culpa de Inoo-chan.-
le contestó simplemente Yabu cruzándose de brazos al igual que Yaotome.
-¿E Inoo?- pregunto analizando lo que escuchaba.
-Inoo-chan parece que de alguna manera… creo que coquetea
con Takaki, y eso es lo que lo confunde. Pero sabes, es divertido jugar con ese
tipo, hace rato lo hice enojar, cuando abracé a Inoo-chan en la sesión.-rio
Yabu traviesamente.-Quizás Inoo también está jugando a divertirse a costa de
él.
-Humm… y no llegaste a pensar que tal vez… ellos…-dijo
Hikaru uniendo sus dedos simulando que eran sus compañeros abrazándose.
-¿Eso no lo hace mas divertido?-le sonrió.
-¿No te parece algo cruel? Takaki no es la persona más
inteligente del mundo, seguro que no sabe ni lo que le pasa.- torció la boca
Hikaru.
Se quedaron viendo unos segundos, rompiendo el silencio
con unas risa traviesas y malévolas. Seguro que ellos disfrutaban con ese tipo
de cosas.
Takaki entro a los baños del lugar, ya que el camerino no
tenía. Miro a Inoo lavándose las manos, titubeó un momento pero al final se posó
a su lado para enjuagar su cara. Inoo lo miró de reojo secándose las manos.
-Takaki, sabes…- comenzó a hablar Kei, con su toalla aun
en mano- a las fans, en serio les gusta vernos a todos en pareja… ¿no es
extraño?-le sonrió.
Yuya levanto la cabeza, su cara escurría de agua, el otro
sonrió ante tal imagen, parecía un cachorrito bajo la lluvia.
-¿En serio? Bueno… creo que es parte de lo que hacemos
¿no? Vender ilusiones. Eso es lo que dicen los senpais.- Sonrió mientras Inoo
comenzaba a secarle la cara con su toalla.- Ah, te manchare la toalla de
maquillaje.- le dijo algo avergonzado.
-Este bien, no importa- siguió secándolo en silencio,
ninguno de los dos decía nada. Hasta que Inoo rompió el silencio de nuevo –
Sabes… últimamente eh pensado que creo que soy tu fan-
-¿Mi fan?- Rio nervioso apuntándose a la cara.
-Si… Takaki ¿Qué me costaría una ilusión contigo?- le
dijo suavemente apartando la toalla de su cara, acercando su rostro al del
otro.
-¿Eh?- le miro incrédulo sin saber que contestar.
-¡VALLA! ¡Que esta es una sesión muy larga! – Se quejó
Daiki entrando al baño, recargando sus manos en la espalda de Takaki.- Yuya
debes irte a retocar~
-Sí, ya voy- le hecho una última mirada a Inoo ante de
salir. Este se veía un poco molesto, pero estaba demasiado confundido como para
decirle algo.
Inoo seguía con la mirada en el suelo, luego miro a Daiki
de una manera un tanto amenazante. Venganza.
-Dai-chan… ¿sabes?- comenzó caminando hacia la salida. Se
giro llegando a la puerta y con una sonrisa un tanto malévola se dirigió de
nuevo a su compañero- Esos pantalones… te hacen ver bastante bajito. – remato
girándose triunfal, dejando a un Daiki bastante consternado y molesto, pensando
seriamente en ir a hablar con el vestuarista.
Camino de vuelta al camerino mirando a su alrededor
tratando de toparse con alguien en especial. Y ahí estaba, sentado frente a un
gran espejo, con Yuto agarrando su flequillo en un adorable chongo en forma de
palma. Yuto hablaba sin parar de cómo iba a retocar su maquillaje, ya que las
asistentes se habían tomado un descanso, no les quedaba más que maquillarse
ellos mismos. Comenzó a ponerle la base de maquillaje, apenas unas gotas en las
zonas esenciales cuando Ino se acercó a ellos sentándose en la mesa con su
espalda dando al espejo, quedando frente a sus compañeros, muy cerca de Takaki.
-Yuto ¿yo puedo
ayudar?- le sonrió Kei tomando una esponjita para aplicar el maquillaje. Yuto sonrió
y le dejó ese trabajo, ya que era su turno para la sesión.
Yuya se ponía cada vez más nervioso, la verdad no sabía
si Kei no se daba cuenta, pero realmente se le acercaba demasiado al aplicar el
maquillaje, tanto que podía sentir su respiración chocando contra su rostro.
Apretó sus labios ante sus extraños pensamientos hacia su
compañero, en serio estaba muy cerca, no le molestaba… pero…
-Inoo- susurró.
Inoo sonrió de lado, ese tono de voz le parecía bastante
adorable. Hecho un vistazo, no había nadie más en el camerino.
-Takaki no te muevas, ahora te delineare los ojos- le
dijo tomando el lápiz con su mano derecha y con la izquierda posada suavemente
sobre su mejilla, jalando hacia abajo con su pulgar para poder delinear el
contorno inferior de su ojo. Su cara cada vez más cerca a la del mayor. -
Yuya abrió sus ojos al sentir como los labios de Inoo
presionaban suavemente los suyos. No hubo reacción, solo tenía sus ojos bien
abiertos mirando a la nada. Estaba demasiado sorprendido.
Kei se separó de él sonriendo tiernamente, esa misma
reacción era la que estaba esperando de Yuya.
Era tan predecible, tan tierno. Terminó de delinear ambos
ojos y desato su chonguito, Yuya seguía con la mirada pérdida y los labios un
poco entre abiertos. Tan lento, pensó Inoo mientras le acomodaba los flequillos.
Yabu entró cantando animadamente seguido de Hikaru,
dándose cuenta de la sonrisa traviesa de Kei y el semblante perdido de Yuya.
-¿Qué hacen tan solos?- sonrió Yabu acercándose a donde
se encontraban.-Oh Yuyan, te vez muy bien. –le elogio, girando la silla
quedando de espaldas a Kei.
-Claro, si Inoo-chan le maquilló con mucho amor. – Le
guiñó el ojo Hikaru a Yabu.
Inoo los miró fijamente. Estos le devolvieron el gesto.
Ellos lo sabían, y él sabía que lo sabían. Sabiendo esto
¿Qué hacían metiéndose donde no los llamaban?
-¿De qué hablan?- les sonrió Inoo tiernamente –Takaki es
guapo aun sin maquillaje- les dijo abrazando por el cuello al mayor, mirando
retadoramente a los otros dos sin dejar de sonreír.
-¡Ah! Lo siento, dedo hacer… algo. – tartamudeó
levantándose de la silla, apartando bruscamente con sus brazos a Inoo. Salió
del lugar.
Kei se quedó mirando a la puerta de nuevo. ¿Qué acaso ese
chico solo sabía salir huyendo?
-Oh~ creo que Inoo-chan escogió una presa difícil de
cazar- se burló Kota recargándose a un lado de Kei.
-Si tan solo aceptara la ayuda que le brindan sus hadas
madrinas- rio Hikaru inflando sus mejillas, haciendo una pose extraña.
-No necesito su ayuda- les contesto secamente.
-Ya veo. Estas bastante confiado, tomando en cuenta que
esta es la segunda vez que Yuyan sale despavorido huyendo de ti.-
-Es la tercera- susurró algo molesto, sin intención de
ser oído en realidad. Se levantó empujando intencionalmente a Kota y saliendo
del camerino.
-Yo digo que las hadas madrinas deberíamos actuar.-
Sonrió Yabu cruzando sus brazos.
-Me gusta más ser un cupido… ¿no podemos ser cupidos?- le
señalo Hikaru.
-Cierto, cupido es el Dios del amor.-
-Cupido suele ser más silencioso- se escuchó una voz
desde debajo de la mesa.- Y ¿no creen que lo mejor es dejarlos en paz?
-Yama-chan~ no es elegante escuchar las conversaciones
ajenas- sonrió Yabu tomando asiento en la mesa.
Yamada se levantó perezosamente.
-No es que quisiera oír. Fuera de eso. Esta situación…
¿Por qué no parece sorprenderles?-les miro interrogante sentándose también.
-¿Sorprender dices? Yamada-kun es muy joven aun para
entenderlo.-sonrió Hikaru.
Yamada lo miro entrecerrando los ojos. ¿Acaso lo llamo
niño?
-De cualquier forma. Amoríos dentro del grupo… eso no está
bien ¿No les parece?-los miró raro mientras habría una botella de agua.
-El amor es universal~ y puede estar en donde quiera- rio
Yabu.
-Y el hecho de que ambos son chicos ¿Qué hay de
eso?-levanto una ceja.
-¿Qué con eso?- le miro Hikaru parpadeando múltiples
veces fingiendo inocencia.
-Yama-chan, el amor no diferencia género, estatus, edad,
ni nada. El amor solo ataca, te atrapa y ya no puedes huir de él~ -predicó Yabu
casi subiéndose a la mesa. Hikaru le aplaudía desde abajo.
-¿Se burlan de mí?- le miro achicando los ojos.-Como sea,
no seré parte de esto. Esto no está bien.-
Dejo su botella en la mesa, levantándose de su lugar
dispuesto a marcharse.
-Espera- le detuvo Hikaru parándose frente al menor-
Sabes el secreto-
-Lo gritaban a los cuatro vientos, era de esperarse que
alguien lo supiera.-le cortó.
-…Sabes el secreto~ y no puedes irte. Ya eres parte de
esto.- le dijo Hikaru haciendo mil
muecas mientras movía sus manos frente a la cara de Yamada.
Ryosuke rio y suspiro resignado.
-Al menos… ¿ellos se quieren?- le miró jugueteando con la
botella aun en sus manos.
-Inoo se ve muy interesado- Dijo Yabu acercándose a los
otros dos.
-Creo que Yuya es tonto- opino Hikaru.
-Sí, no es nuevo. Pero… ¿él querrá a Inoo-chan?-
-Bueno Yamada-san esa será su misión.- Dijo Yabu haciendo
pose militar.
-¿Misión?- le miró confuso.
-Misión ¿eh? Ósea ¿descubrir si a Takaki le gusta Inoo?-
-Hacerle ver a Takaki, que le gusta Inoo. –Aclaró Kota.
-Que a mí me gusta… ¿Inoo?- Preguntó Yuya, quien iba de
regreso por unos accesorios que dejo en el vestuario.
-Yuya…-le nombró Yamada un poco asustado, él no quería
enredarse en eso, pero todo indicaba que ya era parte, eso lo ponía demasiado
nervioso –ah… no, a lo que se refieren es que…-
-Yuyan~ A ti te gusta Inoo- Afirmó Yabu muy seguro de sí
mismo- ¿verdad?
Takaki los miró incrédulo.
-¡Por supuesto que no!- gritó frotándose los labios con
el dorso de su mano, tratando de borrar cualquier evidencia del beso de Kei,
hace unos momentos.
-Pero es cierto que últimamente lo ves extraño ¿no?
Quizás esta es la razón – le dijo Hikaru seriamente cruzándose de brazos.
Takaki no decía nada, solo se frotaba los labios con la mano.
-Inoo-chan te hace sentir raro, eso es porque te gusta-
apoyo Yabu a Hikaru.
-Bueno, debe haber una explicación razonable para todo-
intento calmar Yamada, el ambiente se volvía cada vez mas denso. – A veces las
personas nos sentimos extrañas en ciertos momentos…
-Te equivocas- dijo por fin Yuya cortando el discurso de
Yamada, le echó una mirada retadora a sus compañeros.- ¡Se equivocan! ¡Yo no
soy homo! ¡No hay manera de que me guste un hombre! ¡No hay manera en que me
guste Inoo!-grito exasperado.
-Yuyan…- susurró Yamada dirigiendo su vista a espaldas
del mayor.
Takaki se giró siguiendo la mirada de Ryosuke.
-¡Vaya! ¿Qué es todo este jaleo? Vamos, que la sesión
“todos juntos” va a empezar- sonrió Inoo desde el marco de la puerta. Una
sonrisa forzada adornaba su rostro.
-Inoo-chan…- Takaki lo miro sorprendido ¿lo habría
escuchado?
-Ah, ¡vamos, vamos! ¡Yabu~ te toca a un lado mío,
rápido!- Sonrió jalando de un brazo al líder, rozando sin querer a Takaki. Yabu
miró a Yuya antes de salir del camerino, este tenía la cabeza agachada.
-Inoo-chan…- Le llamo Kota ya fuera de camerino.
-Cállate- fue la seca contestación que recibió. Kei
estaba molesto… o triste, quizás.- Por eso les dije que no se metieran- le miró
de reojo, cualquiera podría pensar que era una mirada de odio, pero Yabu lo
conocía bien, Inoo estaba realmente destrozado, aunque le sonriera al mundo
superficialmente.
Continuara....
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